martes, 13 de noviembre de 2012

Wow! vengo a ver que desde 2010 no escribía en este mi espacio de charla conmigo misma... Hace un par de semanas, tomando unas copas con unas amigas, una de ellas me recordó lo que era este espacio para mi, y como me ayudó a superar mi proceso de desempleo que tanto trabajo me costó y que aun guarda una gran cicatriz en mi vida, pero también el mejor y mas grande aprendizaje de vida que sin duda he tenido.

Y es por ello que decidí volver... volver a escribir aquí lo que estoy viviendo y las cosas que he tenido que aprender y volver a superar y mas que nada, madurar.

Desde 2010 hasta hace mas o menos un mes y medio, estuve en un empleo que para mi era el mandado a hacer a mi medida y mis capacidades... fui muy pero muy feliz con ese trabajo dando siempre todo al 100%, en gran parte por agradecimiento al universo por haberme dado la oportunidad de volver a tener la oportunidad y la bendición de trabajar, y después porque realmente me gustaba y disfrutaba lo que hacía. Pero como todo, sabemos que no existen los paraísos laborales, y a pesar de haber sido tan feliz y plena en mi trabajo y con mi equipo de colaboradores, las injusticias comenzaron a suceder... convirtiendo a mi trabajo en una "relación" muy desgastante y hasta enfermiza. No logré tener nunca el reconocimiento a mi trabajo (en ninguna medida, ni económica, ni por escrito, vaya... ni una palabra de felicitación jamás), lo cual hizo que mi desanimo fuera aun mas grande. Así que de pronto pasé del agradecimiento por el trabajo, a buscar un lugar en donde mi valor fuera reconocido, comencé a revalorarme a mi misma y el trabajo, experiencia y conocimientos que hasta entonces había adquirido, y fue así como decidí aceptar otra propuesta en una empresa nueva y volver a empezar de cero.

Por supuesto que todos los miedos anteriores eran latentes, creo que nunca podré superar el temor a ser despedida, aunque también es cierto que ya tengo amplia experiencia y se lo que puede pasar. Sin embargo, el cambiar a un trabajo donde estaba totalmente fuera de mi zona de confort me representaba aun mas incertidumbre y temor, pero aun así decidí desintoxicarme de mi empleo anterior, y tratar de desenamorarme.... pq si, dejé mi empleo anterior aun estando enamorada de el, y las mujeres sabemos muy bien lo dificil que es eso si lo comparamos con una relación amorosa. Y tal cual me sentía....

Como lo imaginarán, y como ahora lo se, el cambiarse a un trabajo donde uno no se siente bien ni con las actividades ni con el sector ni con basicamente nada mas que el sueldo, pues no es la mejor opción... de manera que mi transición no fue la mas fácil tampoco. Aun así decidí probarme a mi misma, ser capaz de aprender cosas nuevas y diferentes, y así lo he estado haciendo, pero aun no hay amor entre nosotros ajajaja.

Hace un par de semanas me llamaron de otra empresa para hacerme una propuesta muy interesante, haciendo algo que me encanta y que ya he hecho. Es una empresa muy grande y consolidada, unas oficinas majestuosas, una ubicación fantástica, un equipo de trabajo joven y profesional... en fin... digamos que era el candidato perfecto, y lo mejor de todo... ME QUERÍAN A MI!!!!. Imaginarán mi incredulidad ante el hecho, pero decidí aceptar la propuesta, y hoy que me llamaron para hacerme la propuesta económica formal, en verdad debo decir que no doy crédito a las bendiciones que me están siendo otorgadas... pareciera mi trabajo ideal, con el sueldo ideal, prestaciones mas allá de lo imaginable para mi, pero lo mas importante: haciendo lo que me gusta!!!!.

El día de hoy parece ser que se pone fin a tantos años de peregrinar en mi vida laboral, tengo la certeza de que permaneceré aquí mucho tiempo y que voy a desarrollarme plenamente aquí. Tengo proyectos personales que cumpliré con el apoyo de esta empresa, y de verdad no puedo creer que esté recibiendo tantas bendiciones, de las cuales estoy segura no ser merecedora, pero una cosa si les digo, y es por eso que quise volver a escribir en este mi espacio... estoy segura de que puedo volver a soñar! porque ahora se, y creo en todas y cada una de las frases de aliento que me dijeron alguna vez: "despues de la tempestad viene la calma", "te espera algo mejor", "algo muy bueno viene para ti, pq te lo mereces", "por algo pasan las cosas", etc, etc, etc.

Hoy solo quiero decir: GRACIAS, a todos... los presentes, los ausentes y todos aquellos que me acompañaron en este viacrucis... los que me leyeron, los que me dieron de comer cuando no tenía, pero sobre todo, a aquellos que creyeron en mi aun cuando yo ya no creía en mi misma... GRACIAS A TODOS!.

Empiezo el 26 de noviembre.... y les estaré contando, pero mientras tanto... ATREVANSE A SOÑAR!!!!.

martes, 7 de diciembre de 2010

De regreso....

Tengo mucho tiempo que no escribo... en realidad básicamente desde que conseguí trabajo y el ritmo del reingreso me absorbió tanto que no tenía tiempo ni energía para hacerlo.

Los que me conocen saben que he pasado las duras y las maduras en estos ya 8 meses que llevo trabajando. Primeramente fue el temor que me dió de volver a perder mi trabajo a los 3 meses que no me dieron mi planta como me lo habían prometido. Después de mucho sufrir y de mucho miedo por perder lo encontrado, y de negociarlo y de ser altamente apoyada por mi maravillosa jefa, pues me dieron mi planta a los 5 meses de estar aquí, no sin antes haber visto como corrían al Gerente de Marketing que había entrado a trabajar apenas un mes antes que yo... y cuya vacante yo había aplicado también.

Luego de tener mi plaza, entenderán lo feliz que estuve. Para este momento ya había yo adquirido la responsabilidad de vivir sola en mi propio departamento,c on las responsabilidades, angustias, depresiones, alegrías y comodidades que esto representaba. Por lo que ahora, conservar mi trabajo se había convertido en la prioridad no. 1.

En estos 8 meses he tenido la fortuna de madurar en mi trabajo en el sentido de que al tener 6 personas a mi cargo, he tenido que sortear mi manera de ser, la diferencia minima de edades y ejercer también el papel de autoridad. He tenido la suerte de contar con un grupo de niñas maravillosas que son unas estrellas en lo que hacen, y la verdad las siento como mis hijas.

Pero ahora me ha tocado estar en el otro lado de la mesa... ahora me ha tocado dejar ir a una de mis niñas porque estamos reestructurando el área para el año próximo, y ha sido un tema muy difícil para mi, porque es parte de lo que tengo que hacer como su jefa, pero al mismo tiempo el haber estado en esa posición varias veces me hace sentir mas vulnerable a lo que pueda estar sintiendo. Al menos lo tomó con mas tranquilidad que yo.... será porque a diferencia mia, no tenía tantas cosas por pagar, y es becaria, y aun vive con sus padres.... supongo que ahí radica la diferencia.

Hoy por hoy me doy cuenta que en estos temas del desempleo es complicada la cosa. Hablando con un amigo ayer, que es Director regional de una empresa, me comenta que tuvo que despedir a un empleado suyo en quien tenía depositada toda la confianza, y con quien había convivido de manera personal en años anteriores. No creo que hubiera sido su amigo, pero finalmente si tenía el nivel para haber podido salvarle el cuello de haberlo querido, sin embargo me comentaba que habían otras cosas en juego, como que ya había cometido otros errores anteriormente y había un riesgo (no tácito) de que volviera a ocurrir. Al escuchar estas cosas me di cuenta de dos cosas: 1. en el trabajo no tienes amigos y, 2. cuida tu trabajo sobre todas las cosas, sin confiar en nadie.

Es complicado realmente darte cuenta que por mucho que convivas a nivel personal con tu gente de la oficina, alguno de ellos vaya a meter las manos por ti cuando te vayan a despedir. En realidad eso jamas lo he visto y es triste porque uno cree que tiene amigos o que puede confiar en que si algo llegara a pasar puedes atenerte al apoyo de la gente con la que convives, y la verdad es que no es así, y a ningún nivel por lo que veo... si eres Director General y no puedes salvar una cabeza, menos lo harás a otros niveles.

bueno, dejo esta reflexión para aquellos que tal vez me lean... y prometo que volveré!.

lunes, 19 de abril de 2010

Quien diría

En las primeras semanas de mi trabajo no dejaba de sorprenderme de lo afortunada que era, primeramente de tener trabajo, pero también de tener un trabajo así.

Cuando era estudiante de Relaciones Internacionales, soñaba con estar en reuniones internacionales o tener acceso a Embajadores y embajadas, etc. Cuando estaba estudiando aun, recuerdo muy claramente haber ido a un seminario de estudiantes de una Asociación de Estudios Internacionales, que hace este seminario nacional una vez al año. En aquella ocasión recuerdo que iba a asistir el mismísimo embajador de Estados Unidos, con todo el despliegue de seguridad que aquel evento implicaba. Por consiguiente recuerdo haber visto muy pero muy a lo lejos al mencionado Señor Embajador. Recuerdo que lo veía como algo prácticamente inalcanzable y mas para una insulsa provinciana que apenas estudiaba en la magna casa de estudios.

Años después tuve la oportunidad de estar justo en frente al Embajador, escuchando su discurso y con él mirándome directamente a los ojos. Obviamente de mi etapa de estudiante a ahora han pasado como 3 Embajadores, pero aun así, estando yo ahí sentada, pude valorar ese tal vez, insignificante detalle, que probablemente alguna otra persona pasaría por alto, lo cual me dio gusto, el darme cuenta que aun tengo capacidad de asombro y aún valoro todas las pequeñas cosas que ahora tengo la fortuna de disfrutar, porque de verdad que lo disfruto.

La verdad es que muchas veces en estas cortas semanas he estado a punto de las lágrimas. Uno muy particular fue cuando se presentó con nosotros nuestro presidente. Un prestigiado empresario, presidente también de una empresa extranjera muy prestigiada en México. Cuando nos dio su discurso mencionó lo siguiente: "trato de no equivocarme y no hacer las cosas mal, pero hoy me doy cuenta de que los errores que cometí en mi vida, son las experiencias que mas me están sirviendo hoy por hoy para tomar las decisiones acertadas. Si no hubiera vivido esos errores, ahorita no estaría donde estoy". Evidentemente al escuchar eso de una persona tan importante, no pude mas que sentirme reflejada y mas que nada, reivindicada de saber que aun habiendo tomado malas decisiones en mi vida que me llevaron por caminos que no tenía pensados, pues quiero pensar que todo eso me servirá en un futuro... o tal vez, quien sabe si ya m está sirviendo en este momento.

Woman's power

Anteriormente había platicado sobre mi aversión a trabajar con y para mujeres. Pero la verdad es que me he tragado todas y cada una de mis palabras. Tengo la FORTUNA de tener una jefa increíble... la admiro en tantos niveles que me parece casi imposible de creer. Es una esposa, madre y profesionista, súmamente inteligente que tiene que lidiar todos los días con la misoginia de los hombres que no están acostumbrados a tener una mujer como ella al frente. Siempre está diciendo lo que opina, pero de una manera inteligente y acertada, no la tipica persona que habla solo por hablar. De verdad que estoy fascinada con ella. Creo que nunca había estado tan maravillada con un jefe tanto en mi vida... bueno solo con uno, el primero, pero con el tenía varias cosas en su proceder que no me parecían. Con esta jefa en realidad no tengo absolutamente nada negativo que decir. Y eso es muy raro en mi que siempre ando viendo "areas de oportunidad" por cierto, ODIO esa frase, siento que es una manera "linda" de decir: errores... algo muy mexicano ya que no estamos costumbrados a decir cosas negativas de frente, siempre tendemos a estarlo maquillando todo.

Mi jefa además de ser una mujer súmamente inteligente, también gusta de ser mujer, y con ello quiero decir que no es la típica "intelectualoide" que rechaza su belleza de mujer para ser considerada "en serio". Mi jefa al contrario, gusta de verse y saberse guapa y totalmente femenina. De verdad que es un gusto poder trabajar y compartir con alguien como ella.

Pero no todo es hacia arriba, las niñas que están a mi cargo me sorprenden a cada minuto. Son niñas de entre 22 y 24 años con una inteligencia privilegiada también. Emprendedoras, atinadas, inteligentes pero mas que nada, dispuestas a aprender y por lo tanto no son liosas. Es un deleite estar rodeada de mujeres así, me siento increíblemente afortunada.

Han habido días en que las veo llorar por algún colico insoportable, otros días en los que sencillamente se derrumban ante la frustración con lágrimas o corajes, pero he visto también que hacemos un maravilloso equipo, porque nos apoyamos unas a otras y eso también es algo que nunca antes había visto. Tal vez sean una nueva estirpe de mujeres trabajadoras, si es así me hacen recuperar la fe en el género, pero mas que nada en el género y su actitud con las congéneres mas jóvenes que vienen empujando con todo.

Definitivamente en este nuevo empleo he replanteado muchas cosas que ya pensaba de manera distinta. Primero pensaba que no podria sobrellevar un matrimonio feliz con hijos y todo... sobre todo los hijos... ya había desistido de tenerlos, pero ahora veo que si es posible tenerlo todo.

También había desistido en tener fe en las mujeres que trabajan, no había encontrado mujeres que estuvieran dispuestas a dejar de lado sus temores y envidias, y quisieran aun enseñar a las nuevas generaciones sin temores absurdos a sentir amenazada su posición.

Este nuevo trabajo me está enseñando muchas cosas, pero mas que nada me está haciendo muy pero muy feliz.

Del otro lado de la mesa

Se que he estado muy desconectada y no he compartido mucho mis recientes experiencias, pero deberán saber que estuve en pleno periodo de mudanza, y pues dicho esto, comprenderán que no tenía Internet... aunado a esto, además estaba el asunto de que mi cuerpecito se había estado re-acostumbrando al trajín laboral, por lo que sirva esto a tono de disculpa.

Tenía muchas ganas y cosas que relatar. Entre ellas una experiencia que me marcó a la semana de estar trabajando y fue el estar del otro lado de la mesa entrevistando a una candidata para una posición en mi dirección pero para un puesto de coordinadora. Resultó que la niña a la que entrevisté había ido originalmente ¡para mi puesto! así que comprenderán lo complicado que fue.

La entrevista fue fluida, aunque definitívamente el estar del otro lado de la mesa también tiene su responsabilidad, o tal vez solo sea yo que tengo el peso de todas las veces que estuve pidiendo trabajo en múltiples entrevistas.

Hice preguntas personales, preguntas profesionales y al final me di cuenta de que definitivamente me habían seleccionado correctamente para el trabajo que ahora desempeño, porque al platicar con la niña X, si dije: "no pues yo tengo mas experiencia que ella". Sin embargo no pude evitar tener un enorme sentimiento que embargaba mi corazón al ver su cara de súplica por una oportunidad para demostrar sus capacidades. Además, para colmo, la niña X tenía en su currículum un sin fin de experiencias breves que denotaban "inestabilidad laboral" justo como era mi currículum. Fue toda una experiencia. Por lo mismo, al final de la entrevista, me quité mi careta de "Gerente" y potencial "Jefa" para convertirme en una mujer empática a su situación y le platiqué mi experiencia que hacía apenas unas semanas había yo vivido justo como ella. Le di todos los consejos que he acumulado con el paso doloroso de las entrevistas y cuando finalmente le dije: "No te avergüences por tu experiencia, eres toda una profesional que vale mucho aun cuando no tengas trabajo" después vi como comenzaron a correr las lágrimas por sus mejillas....

Fue ahí cuando me di cuenta que justo había dado en el clavo de lo que todos los desempleados vivimos y tenemos que tratar de evitar, o al menos intentar que no se nos note... y es precisamente el sentirnos inútiles y poco dignos de cualquier trabajo. Luchar contra esa sensación de derrota una y otra y otra y otra vez es de las cosas mas difíciles con las que se tiene que sortear en la entrevista.

NO lo voy a negar, me sentí terrible por verla llorar, pero al mismo tiempo me dio gusto que la entrevistara yo, porque creo que NADIE te dice las cosas que yo le dije en ese momento. Ese día yo me había "disfrazado" de toda una ejecutiva exitosa, con mi traje sastre y excelsamente arreglada porque había tenido una reunión por la mañana, una reunión-desayuno de trabajo, al cual no tenía dinero para asistir, porque aun no me habían pagado. Fue entonces cuando le dije a la niña X: "Tu que me ves en este momento crees que el único dinero que traigo en la bolsa son 30 pesos?" cuando me vio nuevamente y me respondió un sincero "no".... y fue cuando le dije: "todo es cuestión de actitud niña X. Tienes que convencerte a ti misma cuanto valor tienes como persona, independientemente del trabajo o el dinero que tengas en la bolsa, para después poder salir a enfrentar a los reclutadores y convencerlos de la realidad que tu quieres, no de las circunstancias temporales que te rodean" y de verdad creo firmemente en eso.

La verdad es que no creo que se vaya a quedar con el puesto, no por falta de capacidad, sino porque como siempre pasa, la posición dejó de estar disponible y no la llamarán... lo cual me entristece un poco pero me deja tranquila el pensar que sembré en ella algo que a mi me costó muchas lágrimas entender, y tengo la certeza de que pronto conseguirá algo mucho mejor.

martes, 23 de marzo de 2010

No estaba yo tan equivocada....

Estaba yo el día de hoy leyendo el periódico El País, y me llamó mucho la atención que venía un artículo titulado: "El despido humanizado" donde hace referencia a estas nuevas modalidades para las empresas de personas especializadas en este tema para las empresas. El llamado "outplacement" o "desvinculación asistida" en otras palabras, tratar de hacerte menos duro el momento del despido y darte posibilidades a ser contratado por otra empresa.

Me llamó mucho la atención al ver que lo que yo pensaba que emocionalmente es el despido y como compararlo con una relación amorosa (mi entrada sobre el noviazgo y el desempleo..) ¡es realidad!. La nota a la letra dice:

"... Se trata de especialistas en Recursos Humanos que alecciona a empresarios sobre cómo debería ser un despido, además de apoyar y orientar profesionalmente al despedido para recolocarlo en otra corporación. Empáticos, humanos, sinceros y adictos al coaching y al sentido común, así son los ángeles de la guarda del despido. Una situación que se parece cada vez mas a una ruptura de pareja".

Lo cual me hace ver que no estaba yo diciendo desvaríos de una mente desempleada, ¡se siente EXACTAMENTE igual!: frustración, dolor, angustia, coraje, desesperanza, pero sobre todo, mucho amor por tu trabajo aun... así como cuando terminas con tu pareja el desprendimiento es lo mas difícil.

Pero bueno, al igual que como en una relación de pareja que termina, donde crees que jamás encontrarás otro igual, pues así es en desempleo, y te conformas entonces con cualquiera que se te aparezca delante, aún cuando no sea el ideal o que al menos se le acerque a tu "ex". Miguel Portillo de Michael Page, menciona también en el artículo que: "El peor enemigo del despedido cuando busca trabajo es el propio trabajador. La desorientación y el pesimismo plantan una semilla de conformismo en el individuo. Muchos se sienten obligados a aceptar lo primero que les viene, aunque esté por debajo del que desempeñaron con anterioridad".

Pero al igual que en las relaciones laborales como las de pareja, el asunto es saber esperar, y esperar por la persona adecuada y también por la posición adecuada. Aún cuando yo creía dentro de mi desolación que JAMÁS encontraría un empleo como aquel que tanto amé, pues la verdad es otra, ¿porque saben que? no solo he encontrado uno igual que mi "ex" ¡¡¡he encontrado uno mejor!!!.

Día 2. Mi primer semana...

Ayer fue mi primer día en la oficina y a decir verdad no esperé ver nada de lo que vi. Todo ha superado por mucho mis expectativas y la verdad es que me siento feliz.

Mi jefa es extranjera, y desde el inicio me explicó como estaba integrada la dirección y lo que esperaba de mi y de mi posición, lo cual al entenderlo me llenó de gusto porque no esperaba nada de esto. Tengo un puesto de Gerencia y tengo 5 personas a mi cargo, pero lo mas importante es que tengo una Directora como jefa, cosa que me tranquiliza al saber que no tengo toda la responsabilidad sobre mi cuello.

La persona que está dejando este puesto, no se va por algún disgusto o porque la despidan, cosa que también me pareció muy buena, se va sencillamente porque cambiará de horizontes. Se ha portado genial conmigo enseñándome todo lo que a mi puesto se refiere y ha sido muy abierta para todo.

Por los chicos a mi cargo aun no hablo con todos, solo hablé con una niña que se llama Paulina, tiene 23 años y está increíblemente bien capacitada, tanto a nivel profesional como académico y ella es muy amigable y abierta también a darme información que llegue a necesitar. Me impresionó mucho que una niña con su preparación pudiera admirar mi experiencia y trayectoria profesional. Cuando me dijo: "a mi me gustaría ser como tu cuando este mas grande" no podía creerlo por dos cosas:
1. Por darme cuenta que de pronto soy un "Senior" y no mas un "júnior" como ella... y,
2. Que una niña así de preparada pueda admirarme.

La verdad no pude evitar que vinieran a mi mente todas las mujeres celosas y malvibrosas en mis trabajos pasados que se sentían amenazadas por mi potencial laboral y atemorizadas de que yo en algún momento pudiera quitarles su trabajo, la verdad pude entenderlas un poco mas no justificarlas, eso jamás lo haré. Siempre en mis anteriores trabajos ha habido alguna mujer demente que me ha bloqueado mi trabajo, me ha impedido crecer o que definitivamente me ha despedido por esa misma situación. De ahí mi comentario en la entrada anterior.

La verdad me sorprende que aquí el equipo que es de 8 personas, 7 seamos mujeres, pero bueno, la verdad es que lo sorprendente para mi fue que estas mujeres no son como las que he conocido en otros empleos.

Mi jefa es estupenda, toda una profesional en su ramo, inteligente y sobre todo, dispuesta a colaborar con su gente. Es una persona digna de aprenderle cosas tanto a nivel profesional como personal, ya que lleva una vida de esposa y madre trabajadora con todo bajo control y unos hijos adorables. Lo que para mi pensaba que era algo imposible de que existiera.

El resto de los compañeros han sido muy amables en su bienvenida, desafortunadamente soy pésima para los nombres y los rostros así que me costará algo de trabajo reconocerlos a todos.

Hoy me presentaron con el Director General, una persona estupenda también. Claro y conciso en sus comentarios y me dejó muy clara su política de puertas abiertas para comentar cuestiones que me llegaran a molestar o preocupar, lo cual también es una experiencia totalmente nueva para mi. Pero lo mas importante de mi entrevista con el ha sido que a 2 días de estar aquí ya me ha dado 2 consejos para poder llevar bien las cosas y que mi permanencia aquí sea mas fluida y se me facilite mas la integración con la Cámara.

La verdad ayer que salí no podía mas que sonreír... no podía creer que todo esto fuera posible. Es "EL" trabajo ideal para mi, como si hubiera sido diseñado por Dios para mi y no puedo mas que agradecerlo.